Tecnopedagogía
05/08/19
También conocida como pedagogía digital, podemos entenderla como una grupo de conceptos, ideas y prácticas asociadas a la innovación y desarrollo en el área de la educación en la era digital. Con la tecnopedagogía buscamos dar respuesta pedagógica al impacto de las herramientas digitales en el proceso de enseñanza-aprendizaje.
La gran cantidad de áreas que abarca la tecnología en la educación y su potencial ha creado entusiasmo pero también confusión sobre lo que implica trabajar con tecnopedagogía. El debate se ha desarrollado en torno a la posición que ocupa la tecnología en relación a la educación. Sería un error, por ejemplo, entender el uso de tecnología como un fin en sí mismo, y que si usamos herramientas, dispositivos y plataformas en la educación, ya estamos dando una respuesta tecnopedagógica a los cambios impulsados por la era digital. Paul Fyfe, por ejemplo, plantea el problema de centramos en la tecnología en lugar de la pedagogía en su artículo publicado en el Digital Humanities Quarterly, advirtiendo sobre el riesgo poner a la tecnología en posición de convertirse en un fin en sí mismo: “si la herramienta que tienes es un martillo, es tentador tratar a los problemas como clavos” (Fyfe 2011).
Pero entonces, si la tecnopedagogía no es el uso de la tecnología en la educación, ¿qué es?, ¿podemos, por ejemplo, trabajar de forma tecnopedagógica sin herramientas digitales y computadoras? Sí, porque la tecnopedagogía es el proceso de analizar y gestionar el uso de las herramientas digitales de manera reflexiva, para poder decidir cómo y cuándo usarlas, y para qué. Implica transformar medios y herramientas digitales en recursos con fines didácticos y prestar atención al impacto de las herramientas digitales en el aprendizaje. El enfoque técnico surge recién cuando ya decidimos qué queremos hacer, y necesitamos la solución técnica para alcanzar nuestros objetivos. La tecnopedagogía no es un problema técnico, es un problema pedagógico, no es qué herramientas se usan, sino cómo y cuándo se usan. Esto quiere decir que la decisión de incorporar una herramienta o tecnología debe ser el resultado de una necesidad identificada en relación a un propósito. Los aspectos pedagógicos y las teorías del aprendizaje funcionan como marcos flexibles de organización de las actividades didácticas y las usamos para identificar ese propósito, en función del proceso activo del estudiante. En la práctica, esto se traduce en aprendizaje centrado en el estudiante, más específicamente, en planificar, desarrollar y diseñar procesos y recursos de acción y reflexión por los que pasarán nuestros alumnos.
Si entendemos la tecnopedagogía como un problema pedagógico estamos abriendo espacios de discusión crítica y reflexiva sobre temas de recursos, experiencias, procesos y componentes del aprendizaje en la era digital. En efecto, hoy en día, las áreas dentro de las cuales se desarrolla el trabajo tecnopedagógico se definen de acorde al foco del análisis teórico, las teoría del aprendizaje y la innovación pedagógica en sus múltiples modalidades; presencial, semipresencial, autogestionada y a distancia. En este espacio digital encontrarás recursos, modelos y experiencias de algunas de las áreas que se vienen desarrollando en tecnopedagogía.
By Manuela Cabezas